Concretamente, un tercio más finos: el chorro de 0,2 mm permite conseguir estructuras de filigrana
Después de la revolución llega la evolución: la introducción del corte microscópico mediante chorro de agua hace algunos aĄos multiplicó por diez la exactitud e incrementó las precisiones de posicionamiento en el rango de la Š. Ahora se pueden cortar estructuras con más filigranas. Y es que, en la última versión de los sistemas Microwaterjet, Waterjet AG, como desarrollador del procedimiento y Daetwyler, como fabricante de las máquinas, pueden reducir el diámetro del chorro de corte a un tercio, a 0,2 mm. Por consiguiente, éste es el tamaĄo de los cortes que puede realizar la Microwaterjet F4-01. De este modo, se revelan nuevos ámbitos de aplicación para el corte microscópico por chorro de agua. Los sistemas que ya se están utilizando pueden reequiparse con esta nueva técnica.

Además, el nuevo modelo también se puede adquirir ahora con una versión cerrada. El sistema cubierto ofrece algunas ventajas, especialmente si debe utilizarse en el ámbito de la tecnología médica o si en la misma sala están funcionando máquinas de corte por electroerosión.

Gracias al nuevo cabezal de corte, estamos en la pole position del corte abrasivo por chorro de agua
Cuando se comercializaron los primeros sistemas de Microwaterjet, entonces bajo el nombre de Womajet, éstos representaron un importante avance tecnológico y ofrecieron una precisión inimaginable hasta ese momento. La anchura del chorro, que se corresponde con la anchura del corte, se ha reducido con respecto a los primeros sistemas de 0,5 a 0,3 mm. Y las máquinas alcanzan precisiones de posicionamiento en el rango de la Š. Gracias a esta precisión extrema, las piezas se pueden procesar en una superficie de tratamiento de 600 x 1000 mm con una tolerancia y precisión de repetibilidad de +/- 1/100 mm.

La base para ello es una construcción de la máquina sólida y precisa. Dispone de una bancada muy estable y de un portal de doble lado accionado mediante dos husillos de bolas. Para poder mantener la precisión de posicionamiento en el rango de la Š, se han instalado, entre otros, reglas graduadas de vidrio en toda su longitud.

Con la reducción de la anchura de corte alcanzamos la siguiente etapa del desarrollo. Bien es verdad que se podían obtener chorros finos de 0,025 mm con agua pura para realizar los cortes, pero les faltaba ?fuerza de percusión?, es decir, que sólo eran adecuados para materiales de trabajo muy flexibles. Por este motivo, los sistemas Microwaterjet emplean el denominado procedimiento de chorro de agua abrasivo. En este caso, el chorro de corte es una mezcla de agua y un abrasivo de grano muy fino. Gracias a este nuevo cabezal de corte, que ya se puede adquirir, Daetwyler se sitúa en la pole position del corte abrasivo por chorro de agua.

Un chorro microscópico de agua circular consigue perforaciones con un diámetro de 0,3
La nueva tobera de 0,2-mm y la consiguiente reducción del diámetro del chorro de agua ofrece numerosas ventajas al usuario. Esta pequeĄa hendidura de corte permite elaborar piezas con muchas filigranas, especialmente si se trata de formas muy complejas. Sobre todo se consiguen radios interiores muy pequeĄos. Incluso las perforaciones más pequeĄas, con diámetros inferiores a 0,3 mm, se pueden conseguir con un chorro de agua con penetración circular.

Pero también aquellas piezas que no requieren obligatoriamente un chorro de corte tan fino ven incrementada su calidad. Incluso Beat Trösch, responsable del departamento de Microwaterjet de Daetwyler, se sorprendió positivamente del resultado. Como prueba, se cortaron las mismas letras, primero con un chorr