EMAG: Soldadura por inducción de eldec - Procesos más rápidos, precisos y económicos
El número de procesos de soldadura en la producción industrial es prácticamente incontable. El procedimiento térmico está muy extendido, sobre todo en la industria eléctrica y automovilística. Sin embargo, tan numerosas como las aplicaciones existentes son también las tecnologías empleadas para ello. Para el calentamiento de los materiales, por ejemplo, se emplean hornos o llamas de gas, lo que tiene un inconveniente decisivo: los procesos son relativamente lentos. En este contexto, la soldadura por inducción de eldec cobra una especial importancia por una razón evidente: el proceso es mucho más rápido que la soldadura con llama de gas abierta, ya que la inducción genera el calor directamente en la pieza. Para controlar con total precisión este proceso, los especialistas en inducción de eldec desarrollan inductores y generadores adaptados a los requisitos individuales. Numerosas empresas de distintos sectores apuestan por este enfoque innovador que, además, reduce los costes en distintos trabajos de soldadura.
Un sencillo ejemplo de ello es son los "carriles de cobre" que se emplean en el sector de la industria eléctrica, el cual muestra claramente las ventajas de la soldadura por inducción. En grandes transformadores, estos componentes se encargan de la transmisión de corriente en muchos puntos. Los carriles y perfiles de cobre se sueldan con sus elementos de unión mediante un proceso de soldadura para evitar complicadas estructuras atornilladas. Un fabricante de suministro industrial de corriente apuesta por los procesos de inducción de eldec: los perfiles se sujetan con una mordaza de manera precisa y se posicionan sobre el inductor de eldec. Con una temperatura de soldadura de entre 680 y 720 grados Celsius, la aleación de cobre y fósforo empleada se funde, lo que genera una unión firme y duradera. La gran variedad de inductores manufacturados por eldec garantiza una gran flexibilidad en el proceso de producción. De esta manera, en función de la forma y el tamaño de la herramienta es posible soldar perfiles de cobre muy diferentes. Para ello no es necesario cambiar de fuente de energía, ya que el generador empleado de la familia de productos MICO de eldec, con su técnica de control, garantiza la cantidad de energía requerida en cada momento. El proceso es muy sencillo y rápido.
Energía eólica: soldadura por inducción de anillos de cortocircuito
Igualmente "esbelta" y efectiva es la soldadura por inducción en la construcción de instalaciones de energía eólica. En este caso, los anillos de cortocircuito se sueldan con el generador. Para ello, el inductor fabricado por eldec se encuentra bajo el anillo de cortocircuito, el cual se calienta a una temperatura de entre 680 y 720 grados Celsius. A continuación, la aleación de fósforo y cobre empleada se funde y suelda el anillo de cortocircuito con todas las barras de cobre. La soldadura tiene lugar en un tiempo de entre 3,5 y 4 minutos. "La mayor ventaja de esta aplicación se manifiesta al observar la soldadura", explica Pasquale Di Santi, del departamento de ventas técnicas de generadores de eldec. "Presenta muy poca formación de óxido y, por ello, es de muy alta calidad. Además, en la soldadura por inducción se transfiere muy poco calor a las barras. De este modo se descartan en gran medida las deformaciones en la pieza, porque la soldadura se realiza de una sola vez". En este ejemplo de aplicación también tiene una importancia especial la clase de potencia del generador. Se usa un modelo de frecuencia media de la serie CUSTOM LINE de eldec con 250 kW de potencia. El generador, configurado individualmente, y la robusta tecnología aseguran un proceso de soldadura estable.
Perfección para el intercambiador de calor
En la fabricación de intercambiadores de calor encontramos otro interesante ejemplo de soldadura por inducción. En este componente central, que se emplea en muchos procesos industriales, todos los tubos acodados y elementos de conexión deben estar soldados con precisión, para descartar posteriores correcciones. La soldadura fuerte con anillos de aleación de cobre y fósforo es el procedimiento más comúnmente elegido para ello. Muchos usuarios simplemente utilizan un quemador de gas y calientan los materiales mediante llama. Este proceso no solo es muy lento, sino que, además, no permite regular con precisión la temperatura de soldadura. La consecuencia son distintas calidades de mecanizado. En comparación, el calentamiento por inducción es más rápido y reproducible, y ofrece una mayor fiabilidad de proceso. Con la tecnología de eldec, la secuencia se completa en menos de diez segundos.
Cada vez más presente en el mercado
"En general, podemos observar que nuestro procedimiento de soldadura está siendo objeto de una percepción cada vez mayor en el mercado. Se utiliza en múltiples aplicaciones en los sectores industriales de la electricidad, los intercambiadores de calor y el automóvil", confirma Di Santi. "Pero es en la producción en serie donde destaca de manera especial, gracias a la aportación homogénea de calor, con resultados de gran calidad. En comparación con el calentamiento en el horno o con la llama, también es mucho más rápido y, por ello, más económico. Estas son las ventajas que, en definitiva, convencen al usuario".