BARIN: ¿Qué podemos hacer con el polvo que generamos en nuestros procesos de producción?
En muchas ocasiones, al desarrollar nuestro trabajo (cuando cortamos, amolamos, lijamos, taladramos…) se generan grandes cantidades de polvo. Este polvo se deposita en la maquinaria y en las herramientas que utilizamos, estropeándolas, disminuyendo su vida útil e incluso, perjudicando la eficacia de su funcionamiento. Además, el polvo se deposita en el producto terminado, muchas veces antes de que se termine su fabricación con el perjuicio que esto puede suponer de cara a la posible aceptación del mismo por parte de nuestros clientes o el problema si éste producto es parte de otro equipo… Por supuesto, el polvo descansa en los techos, en los marcos de puertas y ventanas, en los suelos, en el mobiliario, etc. También se instala en nuestra ropa y lo más peligroso…dentro de nuestros pulmones. ¿Qué hacer con el polvo generado? Tenemos varias opciones. ¿Qué pasa con el polvo cuando barremos? Muy fácil, levantar todo el polvo de nuevo dejándolo en suspensión para que luego caiga, se traslade de un lado a otro y se deposite de nuevo. Eso sí, antes …¡lo respiro! En BARIN disponemos de una amplísima gama de equipos de aspiración del polvo en el origen diseñados para aspirar – a través de colectores acoplados a cada herramienta – el polvo y filtrarlo para devolver el aire contaminado al interior de la nave o al exterior pero perfectamente respirable. ¡EN BARIN NOS PREOCUPA EL AIRE QUE RESPIRAS! |