La producción de roscas sin arranque de virutas con un cabezal de laminar roscas tiene una serie de ventajas: Las roscas laminadas se conforman por presión y tienen mayor resistencia. La fibra del material se desplaza y se compacta. Además, el laminado de roscas es más rápido, preciso y rentable que cualquier producción por arranque de virutas. Al mismo tiempo, la producción con un cabezal de laminar roscas es especialmente estable y fiable.

Con la última generación de nuestros sistemas de cabezales de laminar tangencial T3.18 EVO, LMT Fette subraya una vez más que la evolución continua y la fuerza innovadora de la familia EVOline. Descubra ahora las ventajas del T3.18 EVO y ¡haga el cambio! 

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Producción eficiente y fácil de usar

Los cabezales de laminar tangencial pueden montarse en el carro transversal o en la torreta de tornos y centros de mecanizado con avance controlado, así como en tornos automáticos multihusillo. Se caracterizan por su facilidad de uso. Cambio de rodillos rápido, sencillo y sin errores gracias a posiciones de montaje definidas, ajuste fino sencillo y preciso del diámetro de las roscas mediante husillos de ajuste, así como montaje y desmontaje sin herramientas mediante tornillos de cierre rápido: La cómoda manejabilidad facilita enormemente el trabajo diario. Esto repercute en todo el proceso de producción, que puede hacerse mucho más rápido, más ágil y más rentable.

Diseño compacto y estructuras de componentes orientadas al flujo de fuerza

Al minimizar la altura central, el T3.18 EVO permite su instalación incluso en tornos automáticos multihusillo con un espacio de instalación reducido. Como resultado, ahora siempre se puede utilizar el tamaño de cabezal de laminado óptimo para la aplicación. También ofrece un sistema de refrigeración optimizado con opciones de conexión de entrada de refrigerante. La estabilidad del cabezal de laminado se ha incrementado significativamente gracias a la reducción de los picos de tensión. Esto aumenta la fiabilidad del proceso, especialmente en aplicaciones con materiales de mayor resistencia. Esto es posible gracias a las estructuras de los componentes orientadas al flujo de fuerza. Esta optimización biónica sólo puede producirse mediante impresión 3D (fabricación aditiva).